"Sumérgete en el océano de emociones tejido por palabras, donde cada verso es un eco del alma y cada estrofa es un viaje hacia la profundidad del corazón: Bienvenido al santuario de la poesía, donde los sueños danzan entre líneas y los sentimientos florecen en cada palabra."

viernes, 28 de febrero de 2014

A UN VIEJO Y DISTINGUIDO SEÑOR


Te he visto, por el parque ceniciento
que los poetas aman
para llorar, como una noble sombra
vagar, envuelto en tu levita larga.


El talante cortés, ha tantos años
compuesto de una fiesta en la antesala,
?¡qué bien tus pobres huesos
ceremoniosos guardan!? 


Yo te he visto, aspirando distraído,
con el aliento que la tierra exhala
?hoy, tibia tarde en que las mustias hojas
húmedo viento arranca?,
del eucalipto verde
el frescor de las hojas perfumadas. 



Y te he visto llevar la seca mano
a la perla que brilla en tu corbata.



Antonio Machado 

jueves, 27 de febrero de 2014

A KEMPIS



Ha muchos años que busco el yermo,
ha muchos años que vivo triste,
ha muchos años que estoy enfermo,
¡y es por el libro que tú escribiste!

¡Oh Kempis, antes de leerte amaba
la luz, las vegas, el mar Océano;
mas tú dijiste que todo acaba,
que todo muere, que todo es vano!

Antes, llevado de mis antojos,
besé los labios que al beso invitan,
las rubias trenzas, los grandes ojos,
¡sin acordarme que se marchitan!

Mas como afirman doctores graves,
que tú, maestro, citas y nombras,
que el hombre pasa como las naves,
como las nubes, como las sombras...

huyo de todo terreno lazo,
ningún cariño mi mente alegra,
y con tu libro bajo del brazo
voy recorriendo la noche negra...

¡Oh Kempis, Kempis, asceta yermo,
pálido asceta, qué mal me hiciste!
¡Ha muchos años que estoy enfermo,
y es por el libro que tú escribiste!




Amado Nervo

miércoles, 26 de febrero de 2014

SESGO


Si vamos hacia algo
de pronto, una movida equivocada
nos desvía y no llegamos
quizás una señal mal interpretada
por cuestión de lenguaje o confusión
y hasta por miopía
escuchamos la palabra que debería dirigirnos
hacia donde queremos ir
pero el imperfecto oído nos traiciona
y una letra nos cambia el rumbo
saltamos prolijamente todos los obstáculos
y un roce leve no calculado
nos desbarranca
una idea nos deslumbra
pero al intentar describirla se desvanece
un lugar al que no fuimos
un viaje decidido a último momento
en este juego de piezas sueltas
que suben, bajan, a izquierda, a derecha, se mueven
aun cuando, en el mejor de los casos
se sepa adónde queremos ir
sin saber si llegaremos
qué decir de los que vagan
sin rumbo fijo
si en cada instante intentamos trazar
una figura fugitiva que nos desvía
viviendo al sesgo
y vemos un camino derecho
de piadosas actitudes transformadas
en sacrificios humanos
heroicos actos de salvataje
que acaban en destrucción.

tenemos un sueño y no sabemos
si es nuestro sueño
o el que nos obligaron a soñar
y creemos nuestro.
la carretera está sembrada
de caminos laterales
que nunca recorreremos
y escribo una línea que no es mi línea
deseo para sentir el miedo
estamos yendo hacia algo
pero habrá una movida equivocada
y no llegaremos.


Alvaro Miranda



martes, 25 de febrero de 2014

ALTA MAR Y GAVIOTA



Por tu vida yo soy...
en tus ojos yo vivo la armonía de lo eterno.
La emoción se me riega,
y se ensancha mi sangre por las venas del mundo.

No doy ecos partidos.
Lo inmutable me sigue
resbalando hasta el fondo de mi propia conciencia.

En ti yo amo las últimas huidas virginales
de las manos del alba,
y armando lo infinito
te quiero entre las puertas humanas que te enlazan.

En ti aquieto las ramas abiertas del espacio,
y renuevo en mi arteria tu sangre con mi sangre.

¡Te multiplicas!
¡Creces!
¡Y amenazas quedarte
con mi prado salvaje!

Eres loca carrera donde avanzan mis pasos,
atentos como albas
al sol germinativo que llevas en tu impulso.

Por tu vida yo soy
alta mar y gaviota:
en ella vibro
y crezco...

 

Julia Burgos

lunes, 24 de febrero de 2014

CANCION DE LA MUERTE



Débil mortal no te asuste
mi oscuridad ni mi nombre;
en mi seno encuentra el hombre
un término a su pesar.


Yo, compasiva, te ofrezco
lejos del mundo un asilo,
donde a mi sombra tranquilo
para siempre duerma en paz.

Isla yo soy del reposo
en medio el mar de la vida,
y el marinero allí olvida
la tormenta que pasó;
allí convidan al sueño
aguas puras sin murmullo,
allí se duerme al arrullo
de una brisa sin rumor.

Soy melancólico sauce
que su ramaje doliente
inclina sobre la frente
que arrugara el padecer,
y aduerme al hombre, y sus sienes
con fresco jugo rocía
mientras el ala sombría
bate el olvido sobre él.

Soy la virgen misteriosa
de los últimos amores,
y ofrezco un lecho de flores,
sin espina ni dolor,
y amante doy mi cariño
sin vanidad ni falsía;
no doy placer ni alegría,
más es eterno mi amor.

En mi la ciencia enmudece,
en mi concluye la duda
y árida, clara, desnuda,
enseño yo la verdad;
y de la vida y la muerte
al sabio muestro el arcano
cuando al fin abre mi mano
la puerta a la eternidad.

Ven y tu ardiente cabeza
entre mis manos reposa;
tu sueño, madre amorosa;
eterno regalaré;
ven y yace para siempre
en blanca cama mullida,
donde el silencio convida
al reposo y al no ser.

Deja que inquieten al hombre
que loco al mundo se lanza;
mentiras de la esperanza,
recuerdos del bien que huyó;
mentiras son sus amores,
mentiras son sus victorias,
y son mentiras sus glorias,
y mentira su ilusión.

Cierre mi mano piadosa
tus ojos al blanco sueño,
y empape suave beleño
tus lágrimas de dolor.
Yo calmaré tu quebranto
y tus dolientes gemidos,
apagando los latidos
de tu herido corazón.




Jose de Espronceda

domingo, 23 de febrero de 2014

ESPACIO DEL cOlOR



Desde que me anunciaron tu venida
dispuse regalarte los colores
prestados a las frutas y las flores
hermanas vegetales de tu vida.

La fresa me prestó su piel de herida,
el trébol su conjunto de verdores,
el blanco jazminero sus candores
y la aceituna oscura su medida.

El ácido mirar del limonero
y la pupila ingenua de la rosa
mezclaron su color en tu velero.

El mundo de la flor y de la fruta
me ha dado su acuarela primorosa
envuelta en los olores de la ruta.




Mercedes Duran

sábado, 22 de febrero de 2014

ODA A LA TRISTEZA


Tristeza, escarabajo
de siete patas rotas,
huevo de telaraña,
rata descalabrada,
esqueleto de perra:
Aquí no entras.


No pasa.
Ándate.
Vuelve
al sur con tu paraguas,
vuelve
al norte con tus dientes de culebra.


Aquí vive un poeta.
La tristeza no puede
entrar por estas puertas.


Por las ventanas
entra el aire del mundo,
las rojas rosas nuevas,
las banderas bordadas
del pueblo y sus victoria.


No puedes.
Aquí no entras.


Sacude
tus alas de murciélago,
yo pisaré las plumas
que caen de tu mano,
yo barreré los trozos
de tu cadáver hacia
las cuatro puntas del viento,
yo te torceré el cuello,
te coseré los ojos,
cortaré tu mortaja
y enterraré, tristeza, tus huesos roedores
bajo la primavera de un manzano.


Cuando yo muera quiero tus manos en mis ojos:
quiero la luz y el trigo de tus manos amadas
pasar una vez más sobre mí su frescura:
sentir la suavidad que cambió mi destino.



Quiero que vivas mientras yo, dormido, te espero,
quiero que tus oídos sigan oyendo el viento,
que huelas el aroma del mar que amamos juntos
y que sigas pisando la arena que pisamos.

Quiero que lo que amo siga vivo
y a ti te amé y canté sobre todas las cosas,
por eso sigue tú floreciendo, florida,

para que alcances todo lo que mi amor te ordena,
para que se pasee mi sombra por tu pelo,
para que así conozcan la razón de mi canto.



Pablo Neruda

viernes, 21 de febrero de 2014

ES COMO LEVANTARSE CON LOS OJOS



Es como levantarte con los ojos,
con las húmedas alas de los ojos,
al imborrable cielo del recuerdo.
Pasan nubes oscuras, tristes pájaros.
Lentamente tu nombre al fin se queda
solo, desnudo, inmóvil, imposible,
como estrella varada.

Y nombrarte es dolor. Reconocerte
después de cada tarde, como el sueño,
es el dolor diario. Cruzo absorto
calles hacia la angustia de la nada,
entro en casas desnudas,
hablo a seres extraños, torpemente.

Reconocerte es triste, como es triste
siempre identificarnos lo más nuestro
inútilmente cerca, naufragando
en la luz impiadosa de los días.


Entramos y salimos de nosotros
abandonando siempre lo que somos,
esa sola verdad que nos habita,
apaleado perro en las veredas
por las que transitamos sordamente.

Sentirte cerca duele, como duele
siempre palpar la herida que no cura.
Sentirte en lenta huida hacia la tarde
con un dolor solar sobre los párpados.

Veo a veces tu cuerpo como un río,
como un río pasando mudamente
el puente de mis años, por mi pecho.
Y en un heroico cielo, siempre inmóvil,
só1o tu nombre, herido de memoria.

En esta soledad me estoy poblando,
haciéndome de bosque y fronda hirviente.

Una renunciación acaso sea
más que segar la pretendida rosa
brotar oscuros árboles de sueño.



Leopoldo de Luis

jueves, 20 de febrero de 2014

COMO TÚ



Yo, como tú,
amo el amor, la vida, el dulce encanto
de las cosas, el paisaje
celeste de los días de enero.

También mi sangre bulle
y río por los ojos
que han conocido el brote de las lágrimas.

Creo que el mundo es bello,
que la poesía es como el pan, de todos.

Y que mis venas no terminan en mí
sino en la sangre unánime
de los que luchan por la vida,
el amor,
las cosas,
el paisaje y el pan,
la poesía de todos.




Roque Dalton Garcia

miércoles, 19 de febrero de 2014

PEREGRINO


¿Volver? Vuelva el que tenga,
Tras largos años, tras un largo viaje,
Cansancio del camino y la codicia
De su tierra, su casa, sus amigos,
Del amor que al regreso fiel le espere.
Mas, ¿tú? ¿Volver? Regresar no piensas,
Sino seguir libre adelante,
Disponible por siempre, mozo  o viejo,
Sin hijo que te busque, como a Ulises,
Sin Ítaca que aguarde y sin Penélope.
Sigue, sigue adelante y no regreses,
Fiel hasta el fin del camino y tu vida,
No eches de menos un destino más fácil,
Tus pies sobre la tierra antes no hollada,
Tus ojos frente a lo antes nunca visto.




Luis Cernuda

martes, 18 de febrero de 2014

EL VIENTO Y EL ALMA


Con tal vehemencia el viento
viene del mar, que sus sones
elementales contagian
el silencio de la noche.
Solo en tu cama le escuchas
insistente en los cristales
tocar, llorando y llamando
como perdido sin nadie.
Mas no es él quien en desvelo
te tiene, sino otra fuerza
de que tu cuerpo es hoy cárcel,
fue viento libre, y recuerda.



Luis Cernuda



lunes, 17 de febrero de 2014

DESPUES


Es otra

acaso es otra

la que va recobrando

su pelo su vestido su manera

la que ahora retoma 

su vertical

su peso

y después de sesiones lujuriosas y tiernas

se sale por la puerta entera y pura

y no busca saber

no necesita

y no quiere saber

nada de nadie.

 

Idea Vilariño

domingo, 16 de febrero de 2014

CARTA DE BEATRIZ A DANTE



Por voluntad divina
Nos une la memoria.
La sombra de tu cercano tormento
Se mezcla con la mía
Blandamente como si entrara al paraíso.
¡Agonía
Emerges desde el fondo de los siglos!
Si pudiera lanzaría tu nombre
A los brazos infinitos de la noche.
Libre
Sería un ave no tocada por el cielo.
Espigada sombra
Fulguras desterrada.
Cuando retornes al paraíso
Será mi rostro
Una visión con velas
Encendida en desolación.
Será mi cuerpo
Un traje rumoroso
En los huesos lucientes.
¿Qué fatalidad
Encadena el alma
Con las ilusiones fallidas?
Es bueno guardar silencio
Cuando se ha visto al fuego
Caer del cielo.


Lauren Mendinueta

sábado, 15 de febrero de 2014

LA ESTROFA QUE DANZA



Ya brotas de la escena cual guarismo
tornasol, y desfloras el mutismo
con los toques undívagos de tu planta certera
que fiera se amanera al marcar hechicera
las multánimes giros de una sola quimera.

Ya tus ojos entraron al combate
como dos uvas de un goloso uvate;
bajo tus castañuelas se rinden los destinos,
y se cuelgan de ti los sueños masculinos,
cual de la cuerda endeble de una lira, los trinos.

Ya te adula la orquesta con servil
dejo libidinoso de reptil,
y danzando lacónica, tu reojo me plagia,
y pisas mi entusiasmo con una cruel magia
como estrofa danzante que pisa una hemorragia.

Ya vuelas como un rito por los planos
limítrofes de todos los arcanos;
las almas que tu arrullo va limpiando de escoria
quisieran renunciar su futuro y su historia,
por dormirse en la tersa amnistía de tu gloria.

Guarismo, cuerda, y ejemplar figura:
tu rítmica y eurítmica cintura
nos roba a todos nuestra flama pura;
y tus talones tránsfugas, que se salen del mundo
por la tangente dócil de un celaje profundo,
se llevan mis holgorios el azul pudibundo.



Ramon Lopez Velarde

viernes, 14 de febrero de 2014

¡ESTÁ BIEN!



Porque contemplo aún albas radiosas
y hay rosas, muchas rosas, muchas rosas
en que tiembla el lucero de Belén,
y hay rosas, muchas rosas, muchas rosas
gracias, ¡está bien!

Porque en las tardes, con sutil desmayo,
piadosamente besa el sol mi sien,
y aun la transfigura con su rayo:
gracias, ¡está bien!

Porque en las noches una voz me nombra
(¡voz de quien yo me sél), y hay un edén
escondido en los pliegues de mi sombra:
gracias, ¡está bienI

Porque hasta el mal en mí don es del cielo,
pues que, al minarme va, con rudo celo,
desmoronando mi prisión también;
porque se acerca ya mi primer vuelo:
gracias, ¡está bien!




Amado Nervo

jueves, 13 de febrero de 2014

ULTIMAS GOLONDRINAS



Sabes
gustavo adolfo
en cualquier año de éstos
ya no van a volver
las golondrinas
ni aún las pertinaces
las del balcón
las tuyas

es lógico
están hartas
de tanto y tanto alarde
migratorio
de tanto y tanto cruce
sobre el mar y retórica
y pretextos
y alcores

su tiempo ya pasó
lo reconocen
y a mitad de su ida
o de su vuelta
oscuras
cursilíneas
tiernitas de alas largas
se dejarán caer
como buscando
cada una su ola
terminal.


Mario Benedetti

miércoles, 12 de febrero de 2014

EL MAR NO ES MÁS QUE UN POZO



El mar no es más que un pozo de agua oscura,
los astros sólo son barro que brilla,
el amor, sueño, glándulas, locura,
la noche no es azul, es amarilla.

Los astros sólo son barro que brilla,
el mar no es más que un pozo de agua amarga,
la noche no es azul, es amarilla,
la noche no es profunda, es fría y larga.

El mar no es más que un pozo de agua amarga,
a pesar de los versos de los hombres,
el mar no es más que un pozo de agua oscura.

La noche no es profunda, es fría y larga;
a pesar de los versos de los hombres,
el amor, sueño, glándulas, locura.


Idea Vilariño

martes, 11 de febrero de 2014

POEMA PARA LAS LÁGRIMAS


Corno cuando se abrieron por tus sueños mis párpados,
rota y cansadamente, acoge mi partida.

Como si me tuvieras nadando entre tus brazos,
donde las aguas corren dementes y perdidas.

Igual que cuando amaste mis ensueños inútiles,
apasionadamente, despídeme en la orilla...

Me voy como vinieron a tus vuelos mis pájaros,
callada y mansamente, a reposar heridas.

Ya nada más detiene mis ojos en la nube...
Se alzaron por alzarte, y ¡qué inmensa caída!

Sobre mi pecho saltan cadáveres de estrellas
que por ríos y por montes te robé, enternecida.

Todo fue mi universo unas olas volando,
y mi alma una vela conduciendo tu vida...

Todo fue mar de espumas por mi ingenuo horizonte...
Por tu vida fue todo, una duda escondida.

¡Y saber que mis sueños jamás solos salieron
por los prados azules a pintar margaritas!

¡Y sentir que no tuve otra voz que su espíritu!
¡Y pensar que yo nunca sonreí sin su risa!

¡Nada más! En mis dedos se suicidan las aves,
y mis pasos cansados ya no nacen espigas.

Me voy como vinieron a tu techo mis cielos...
fatal y quedamente, a quedarme dormida...

Como el descanso tibio del más simple crepúsculo,
naturalmente trágico, magistralmente herida.

Adiós. Rézame versos en las noches muy largas..
En mi pecho sin lumbre ya no cabe la vida...




Julia de Burgos

lunes, 10 de febrero de 2014

MONZON DE MAYO



El viento de la estación, el viento verde,
cargado de espacio y agua, entendido en desdichas,
arrolla su bandera de lúgubre cuero,
y de una desvanecida substancia, como dinero de limosna:
así, plateado, frío, se ha cobijado un día
frágil como la espada de cristal de un gigante,
entre tantas fuerzas que amparan su suspiro que teme,
su lágrima al caer, su arena inútil,
rodeado de poderes que cruzan y crujen,
como un hombre desnudo en una batalla
levantando su ramo blanco, su certidumbre incierta,
su gota de sal trémula entre lo invadido.

Qué reposo emprender, qué pobre esperanza amar,
con tal débil llama y tan fugitivo fuego?
Contra qué levantar el hacha hambrienta?
De qué materia desposeer, huir de qué rayo?
Su luz apenas hecha de longitud y temblor
arrastra como cola de traje de novia triste
aderazada de sueño mortal y palidez.




Pablo Neruda

domingo, 9 de febrero de 2014

MIRADAS



La niebla empaña mi mirada

y al pasar por el lago

ve dos cisnes felices

que escriben en el agua

un mensaje secreto

con mala ortografía y tinta seca

que yo puedo leer y tú no puedes.


Tú crees que son dos patos

que volando hacia el Sur

hacen tiempo en el lago

cebándose de pan

que les dan los vecinos.


Dentro de poco ya no estarán

mis cisnes ni tus patos,

yo seguiré nublado con la niebla

y tú verás más claro cada día.




Hilario Barredo

sábado, 8 de febrero de 2014

JARDIN



Del esplendor de entonces nada queda.

La nieve ha silenciado el fuego del jardín,

las rosas bautizadas por la hermosa mirada

del jardinero muerte, convirtieron su esencia

al deseo pagano, apóstata la espina de su agua.

La casa se reviste de polvo venenoso

y la hierba del ocio florece entre la plata:

una lengua de ruina lamiendo los retratos.

Se acerca a la ventana lentamente

y descorre el visillo que tiembla polvoriento,

mira el jardín helado y maldice su suerte.

Siente un puño de sangre entre sus venas,

una rosa de ira entre su pecho,

un tiro entre la nuca despejada

y cierra la ventana para siempre.

De espaldas al jardín la luz es una gasa

que le ciega su firma y su palabra

abriéndole una deuda con la vida.

Tan sucio está de soledad y barro

que ya no ve la rosa del verano

que sentencia con fúnebre perfume

su desahuciado nombre en la navaja.

La azada de su sexo ya oxidada

no llegará a estrenar la primavera.



Hilario Barrero

viernes, 7 de febrero de 2014

A UN ESQUELETO DE MUCHACHA


En esta frente, Dios, en esta frente
hubo un clamor de sangre rumorosa,
y aquí, en esta oquedad, se abrió la rosa
de una fugaz mejilla adolescente.

Aquí, el pecho sutil dio su naciente
gracia de flor incierta y venturosa,
y aquí surgió la mano, deliciosa
primicia de este brazo inexistente.

Aquí el cuello de garza sostenía
la alada soledad de la cabeza,
y aquí el cabello undoso se vertía.

Y aquí en redonda y cálida pereza,
el cauce de la pierna se extendía
para hallar por el pie la ligereza.



Rafael Morales

jueves, 6 de febrero de 2014

AQUÍ EN ESTA ORILLA BLANCA



Aquí
en esta orilla blanca
del lecho donde duermes
estoy al borde mismo
de tu sueño. Si diera
un paso mas, caerla
en sus ondas, rompiéndolo
como un cristal. Me sube
el calor de tu sueño
hasta el rostro. Tu hálito
te mide la andadura
del soñar: va despacio.
Un soplo alterno, leve
me entrega ese tesoro
exactamente: el ritmo
de tu vivir soñando.
Miro. Veo la estofa
de que está hecho tu sueño.
La tienes sobre el cuerpo
como coraza ingrávida.
Te cerca de respeto.
A tu virgen te vuelves
toda entera, desnuda,
cuando te vas al sueño.
En la orilla se paran
las ansias y los besos:
esperan, ya sin prisa,
a que abriendo los ojos
renuncies a tu ser
invulnerable. Busco
tu sueño. Con mi alma
doblada sobre ti
las miradas recorren,
traslúcida, tu carne
y apartan dulcemente
las señas corporales,
por ver si hallan detrás
las formas de tu sueño.
No lo encuentran. Y entonces
pienso en tu sueño. Quiero
descifrarlo. Las cifras
no sirven, no es secreto.
Es sueño y no misterio.
Y de pronto, en el alto
silencio de la noche,
un soñar mío empieza
al borde de tu cuerpo;
en él el tuyo siento.
Tú dormida, yo en vela,
hacíamos lo mismo.
No había que buscar:
tu sueño era mi sueño.



Luis Cernuda

miércoles, 5 de febrero de 2014

LA ENAMORADA


Esta lúgubre manía de vivir
esta recóndita humorada de vivir
te arrastra Alejandra no lo niegues.

hoy te miraste en el espejo
y te fue triste estabas sola
la luz rugía el aire cantaba
pero tu amado no volvió

enviarás mensajes sonreirás
tremolarás tus manos así volverá
tu amado tan amado

oyes la demente sirena que lo robó
el barco con barbas de espuma
donde murieron las risas
recuerdas el último abrazo
oh nada de angustias
ríe en el pañuelo llora a carcajadas
pero cierra las puertas de tu rostro
para que no digan luego
que aquella mujer enamorada fuiste tú

te remuerden los días
te culpan las noches
te duele la vida tanto tanto
desesperada ¿adónde vas?
desesperada ¡nada más! 




Alejandra Pizarnik



martes, 4 de febrero de 2014

CONDICIONAL


Si ambiciono un estanque
tan grande como el mar
agostaré la fuente.

Si deseo de mis manos
un jardín amplio como la selva
devastaré Amazonia.

Si mi espíritu no se sacia
del vértigo que respira
agotaré la atmósfera donde existe.

Si no quiero mirar
no podré ver ante mis ojos
el fragmento de verdad que me corresponde.

Si no quiero escuchar
no podrán, en mi corazón de tierra,
susurrarme el rumor del mar las caracolas.





Teresa Sanchez Martín

lunes, 3 de febrero de 2014

LA CARICIA PERDIDA



Se me va de los dedos la caricia sin causa,
se me va de los dedos... En el viento, al pasar,
la caricia que vaga sin destino ni objeto,
la caricia perdida ¿quién la recogerá?

Pude amar esta noche con piedad infinita,
pude amar al primero que acertara a llegar.
Nadie llega. Están solos los floridos senderos.
La caricia perdida, rodará... rodará...

Si en los ojos te besan esta noche, viajero,
si estremece las ramas un dulce suspirar,
si te oprime los dedos una mano pequeña
que te toma y te deja, que te logra y se va.

Si no ves esa mano, ni esa boca que besa,
si es el aire quien teje la ilusión de besar,
oh, viajero, que tienes como el cielo los ojos,
en el viento fundida, ¿me reconocerás?



Alfonsina Storni

domingo, 2 de febrero de 2014

SONETO XXXI


Dentro de mi alma fue de mí engendrado
un dulce amor, y de mi sentimiento
tan aprobado fue su nacimiento
como de un solo hijo deseado;

mas luego de él nació quien ha estragado
del todo el amoroso pensamiento:
que en áspero rigor y en gran tormento
los primeros deleites ha tornado.

¡Oh crudo nieto, que das vida al padre,
y matas al abuelo! ¿por qué creces
tan disconforme a aquel de que has nacido?

¡Oh, celoso temor! ¿a quién pareces?
¡que la envidia, tu propia y fiera madre,
se espanta en ver el monstruo que ha parido!



Garcilaso de la Vega

sábado, 1 de febrero de 2014

ULTIMATUM A UN JOVEN POETA



Que el pan sea pan y mar el mar
Basta de conjeturas
Murciélagos lunares o roedores de orquídeas
Toda palabra tiene precio
Las palabras que atacan como rayos o víboras
Y también madre
Amigo
Y alcohol y cama y mesa
Y el hijo concebido a dulces empujones
Y los hongos que provocan destellos de amor
O resplandores de muerte
Y el poeta que cae bajo las balas
Como un sol que la noche acribilla

Que el pan sea pan y mar el mar
Y el agua eterna
Pero la sed eterna
Para poder decir al fin:
He hallado un pan junto al mar
Los buitres sobrevolaban mi amor
He mordido una orquídea

Los buitres disputaban un cuerpo querido
He guiado camiones y dormido en aserraderos
Los buitres devoraban a mi amada
Viajé de noche sobre la arena caliente
Invoqué los nombres secretos
Conjuré un maleficio
Contuve una catástrofe
Conduje a un águila a su nido
He muerto con mis muertos y estoy vivo

Cuando llegué a la ciudad
Un loco vagaba por las calles
En su mirada había un cuchillo
Le di mi mano
Lo miré
Le hablé y mi voz duró entre los astros
Éramos sólo dos sobre la tierra
Pero éramos dos sobre la tierra

La soledad se hizo añicos
La poesía palabras




Mario Trejo