Amor,
no es para mí ya tu ejercicio,
porque cosa que importa no la hago;
antes, lo que tu intentas yo lo estrago,
porque no valgo un cuarto en el oficio.
Hazme, pues, por tu fe, este beneficio:
que me sueltes y des carta de pago.
Infamia es que tus tiros den en vago:
procura sangre nueva en tu servicio.
Ya yo con solas cuentas y buen vino
holgaré de pasar hasta el extremo;
y si me libras de prisión tan fiera,
de aquí te ofrezco un viejo, mi vecino,
que te sirva por mí en el propio remo,
como quien se rescata de galera.
porque cosa que importa no la hago;
antes, lo que tu intentas yo lo estrago,
porque no valgo un cuarto en el oficio.
Hazme, pues, por tu fe, este beneficio:
que me sueltes y des carta de pago.
Infamia es que tus tiros den en vago:
procura sangre nueva en tu servicio.
Ya yo con solas cuentas y buen vino
holgaré de pasar hasta el extremo;
y si me libras de prisión tan fiera,
de aquí te ofrezco un viejo, mi vecino,
que te sirva por mí en el propio remo,
como quien se rescata de galera.
Baltasar
del Alcázar
Sal y pimienta en este sugestivo poema. Un título, que con solo leerlo, me hace reír, de un poeta sevillano del Renacimiento : BALTASAR DEL ALCÁZAR, por el tono burlesco y satírico, pero a la vez jocoso y festivo. Una automirada interesante, realista y orientada, hacia el objeto amoroso, en la figura de la mujer . Un poeta ingenioso, travieso, ingredientes fuertes, para reflejar una situación de espacio y tiempo, relacionada con sensaciones y sentimientos realistas, que pinta con maestría y sin " pelos en la lengua "....jajajaja. Un poema de un hombre abierto, sin complejos expresivos y con un salero excepcional para mi gusto.
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